La prueba del tiempo

La primera de, Necaxa quiera, muchas entradas bajo este sello.

Una prueba por la que pasan todos los juegos en más de un momento.
Guiada no por su calidad, sino por la de otros. Teniendo al avance por enemigo y al jugador por juez y verdugo. Esa prueba es la prueba del tiempo.

La industria avanza, aparecen nuevas ideas y se renuevan otras tantas, aunque la mayoría de los juegos no pueden seguir este ritmo (los que se actualizan constantemente lo hacen por un tiempo).
Esa es la clave para comprender el dilema; el juego no ha cambiado, ha cambiado el contexto.
Son situaciones externas las que se han reformado. Poco importa lo que haya logrado en su momento. Sería un argumento que no cuadra con la problemática aquí planteada. 
«Ser el primero no significa ser el mejor».
Ha de comprenderse -y agradecerse- que el medio está en constante evolución. Desde los avances gráficos hasta las prácticas de diseño.

Por otro lado, también debe destacarse el componente subjetivo de todo esto. Influye de igual manera el contexto del jugador: a que ha jugado y a que no.
De esta manera, podría verse como una problemática que puede tornarse subjetiva, pero que idealmente se mantiene alejada de ese punto.


Al final del día, cuando mides a una obra pasada con los estándares actuales, es posible que ya no se considere a la altura, ya sea por uno o varios aspectos. 
En ese sentido, que haya envejecido significaría, en el mejor de los casos, que se ha mejorado desde entonces.
Pero si aún puede defenderse y se rehúsa a ser vencido por el tiempo, para mí ese es un verdadero clásico.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Derramando nostalgia